Sofomes buscan evadir regulación antilavado

29 Junio 2015

28 de junio de 2015 / El Economista / Luis Carriles


Las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (sofom) se están convirtiendo en empresas de Sociedad Anónima (S.A.) con el fin de evitar el costo que implican las regulaciones contra el lavado de dinero. Hasta ahora, de las 3,439 que están en operación, al menos 625 ya se transformaron.

Las que se convierten en sociedades anónimas no están obligadas a reportar, ni a consultar sus operaciones en el Buró de Crédito, un requisito que la reforma financiera estableció para evitar sobreendeudamientos y tampoco deberán cumplir con la regulación antilavado que establece la CNBV, aunque sí son vigilados por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda.

Los cambios de sofom a sociedad anónima les permite a las entidades evitar cambios regulatorios incluso internacionales, como la actualización regularoria que se hizo en noviembre del año pasado por el Consejo Federal de Inspección de Instituciones Financieras (FFIEC, por sus siglas en inglés).

La actualización que hizo el FFIEC, la primera en casi 5 años, ejerce mayor presión sobre los bancos para identificar a clientes sospechosos y clausurar cuentas con perfil de riesgo.

Los cambios son para todo el sector financiero, y la normatividad mexicana vigente a raíz de la reforma financiera del 2014 obliga a que toda entidad financiera con menos de 25 empleados tenga un oficial de cumplimiento y las que tienen más empleados tengan, además, un comité de comunicación y control adicional.

El oficial de cumplimiento y el comité son los responsables del cumplimiento del marco regulatorio aplicable, pero el oficial debe ser parte del cuerpo gerencial de la empresa y tener independencia para tomar decisiones a efecto de gestionar los riesgos asociados con lavado de dinero y de activos, así como de financiamiento al terrorismo.

Considerando la relevancia del lavado de dinero y el financiamiento al terrorismo como riesgos penetrantes que en caso de materializarse podrían ocasionar la perdida total del negocio, es que se requiere una rápida profesionalización y certificación de los oficiales de cumplimiento que cobran una importancia crítica.

Actualmente, la CNBV puede certificar a los oficiales de cumplimiento, auditores independientes y otros profesionales que la apoyen en sus funciones de auditoría en materia de prevención de lavado de dinero.

Referencia: http://eleconomista.com.mx/sistema-financiero/2015/06/28/sofomes-buscan-evadir-regulacion-antilavado