Autoridades reconfiguran el open banking mexicano.

07 Junio 2019

Desde la administración anterior, las autoridades financieras indicaban que estaban por sacar la regulación respecto al estándar de banca abierta (open banking), pero solo fue un programa piloto para compartir información de cajeros automáticos, debido a que dicho proyecto todavía no era lo suficientemente rentable para las entidades del sistema financiero mexicano.


El open banking tiene por objetivo el intercambio de información entre entidades financieras (tradicionales y fintech) mediante la implementación de interfaces de programación de aplicaciones (API) y así exista más competencia en el sistema financiero.

Esta información será de 3 tipos: datos abiertos sobre productos, sucursales y cajeros automáticos; agregados o estadísticos, que son los relacionados con operaciones realizadas por entidades financieras; y los transaccionales, los referentes al comportamiento financiero de una persona. Estos últimos serán con la aprobación de la persona para recibir ofertas más personalizadas.

Rocío Robles, Directora de Supervisión de Instituciones de Tecnología Financiera de la CNBV, comento que la implementación del open banking va a traer costos a todas las entidades financieras, ya que necesitarán hacer inversiones para las API, por lo que deben de ser retribuidas con la información que van a recibir.

Gracias al open banking, en el Reino Unido una persona puede buscar comprar una casa y, con su pleno consentimiento, al mismo tiempo recibir varias ofertas personalizadas a su celular de créditos hipotecarios.

Los beneficios que ofrece la banca abierta es que los consumidores pueden elegir entre servicios más eficientes y efectivos; existe una mayor inclusión financiera; las pequeñas empresas pueden acceder a créditos ahorrando tiempo y dinero; y las instituciones financieras pueden ser más competitivas y alcanzar nuevos mercados.

Fuente: El Economista.